¡Siénteme!


No sé si fue yo, tal vez fue el destino…
La culpa se perdió entre soberbia y pensamientos…
Y esta será nuestra cicatriz, nuestra última mirada…
Será la última vez que nuestros ojos hablen…

De hoy en adelante sólo siénteme…
Aún puedo tocarte en mi piel, puedo seguir tus pasos…
Aunque no habrán más instantes… Ya no hay oportunidades…
Esto fue lo que decidí, pero no puedo ser lo que soy… Ojalá y puedan brillar mis estrellas sin ti.

El rencor se esfumó… Y el humo de nuestro fuego se languidece con el aire y la atmósfera…
Ahora sólo siénteme, mantenme en tu pensamiento… Yo podré estallar en cualquier momento…
El reloj se consume así mismo, y el tiempo se convierte sólo en una distracción…
Y aunque te duela, mi nombre quedará entre tus labios… Y aunque me duela, tus labios ya no estarán a mi poder…

Siénteme, sólo recuerda quien fui para ti… Hoy mi esencia se esfuma…
Abre los ojos, abre tu corazón… Aquí, desde el otro lado estoy observándote…
Siénteme, y a través de pensamientos dime que todo estará bien…
Prende la luz; esta habitación no debe seguir oscura…

Mis lágrimas se secaron… Y el dolor me adiestra hasta perderte…
Entre risas, rosas y claveles, se pierde la noción de la realidad…
Arrástrame sobre estos vidrios rotos… Me desnudas, y tengo frío… Necesito tu calor.
Ya no podrás verme; mi color se destiñe… Pero tú aún destellas como el primer día.
Pero a partir de hoy, siénteme… Y besa los restos de mi piel y de mi sangre…
Pero a partir de hoy, siénteme… Ya no puedo respirar, y mi corazón se detiene…
Pero a partir de hoy, siénteme… Duerme tranquila, no dejaré que pesadillas reinen tu sueño…
Pero a partir de hoy, siénteme… No pido que veles por mí, no pido que grites por mí…
Ya me voy, poco a poco mi imagen desaparece… Y lo último que escapa es el resplandor de mis ojos…
Por favor no me olvides… Y por favor, siénteme… Eres lo único que me mantiene vivo; estoy viviendo en tu corazón.
Te dejo mis últimas palabras; porque en cuestión de segundo lanzaré mi cuerpo al abismo de la eternidad…
Así que siénteme… Porque donde quiera que me encuentre, estaré esperándote…

Aparta esas nubes de tu cielo; deja que el sol brille y caliente tus manos…
Porque no has perdido nada, si aún vivo en tu memoria…
Siénteme, y verás que nunca te podré dejar ir…
La fuga de mi gas no te intoxicará…
No has perdido nada… Aún estoy contigo…
¡Siénteme!, verás que te ofrecí más que una vida…
¡Siénteme!, y mantenme vivo en tu pensamiento…
¡Siénteme!, no olvides nunca quien fui y quien sigo siendo…
¡Siénteme!, porque desde el otro lado te observo y te espero...
Tus lágrimas se deslizan por tus mejillas, y ya no puedo secarlas…
Pero aún te amo, esta noche no es el final… El final es sólo un mito…
Así que siénteme; pronto estaremos juntos de nuevo…
Mientras tanto… ¡Siénteme!

No hay comentarios:

Publicar un comentario